Nuria Pérez


Un poquito más de mí...


Mi nombre es Nuria Pérez Do Nascimento, nací el 25 de abril de 1997 en Madrid.


Me considero una chica alegre, respetuosa, amable y muy positiva, siempre sé buscar el lado bueno a cualquier situación. Ahora mismo trabajo por la mañana en el departamento de administración de una empresa de inversión y por la tarde estudio en la universidad autónoma de Madrid.


Debido al trabajo de mis padres, tuve que cambiar varias veces de colegio, en concreto cuatro veces. Mi infancia como he comentado, por los motivos laborales de mi familia, me lo pasaba en el restaurante y ansiaba que llegaran los sábados o domingos, ya que eso significaba que vendrían familias con sus hijos y yo podría jugar con ellos o cuidarles, en caso de que fuesen más pequeños.


En mi caso, después de muchas vueltas, creo que elegí esta carrera por pura vocación, al terminar la ESO, no sabía muy bien que hacer con mi futuro, así que decidí apuntarme a un Grado Medio de Gestión Administrativa, no pensaba que me fuese a gustar, pero, por el contrario, me pareció un mundo diferente al de las matemáticas que solemos dar en clase. Continúe por la rama, apuntándome al Grado Superior de Administración y Finanzas, en ese año también aprendí mucho y me gustaba bastante, pero no lo suficiente como para dedicarla mínimo cuatro años más. Fue entonces cuando medité en todos los momentos con niños pequeños que he vivido, en como sabía manejar las peores situaciones con ellos y en que desde pequeña mi trabajo ideal era ser profesora de infantil, no bailarina, ni doctora como otras compañeras. He ahí mi decisión de elegir esta carrera.

Cuando dispongo de algo de tiempo libre o de vacaciones, me gusta mucho la naturaleza y más si la disfruto con mi perros, ya que para mí, son más que eso, son parte de mi familia. También entre mis formas de disfrutar del tiempo se encuentra, hacer planes con amigos, ir al teatro, viajar, he de decir que es de las cosas que más me gustan, cuando tengo vacaciones trato de visitar algún sitio, ya que es una forma de enriquecerse diferente.



Papel de periódico.


En este primer taller utilizamos como material, el papel de periódico, en un primer momento, trataba de manipular el material, pero más tarde, se nos informó que teníamos que "crear algo", ahí fue cuando se nos ocurrió, hacer un Bob Esponja, una parte del grupo se dedicó a crear complementos, como un lazo, o un anillo, mientras que la otra formamos la figura, debido al poco material que se podía utilizar, en principio pudo parecer difícil, pero según pasaba el tiempo y nos escuchábamos entre nosotras, veíamos que las ideas iban creciendo, hasta formar nuestra primera creación, "SAN VALENTÍN CON BOB ESPONJA", el motivo del nombre, fue que a pocos días de realizar esta actividad, se celebraba San Valentín, así que lo vimos apropiado.
Al tratar de exponer nuestra puesta en escena, fue un poco más complicado, ya que somos bastante vergonzosas, pero con el esfuerzo de todas, conseguimos redactar la historia de nuestro personaje, fue un momento muy cómico.



Es una actividad divertida, ya que, con poca cosa, se puede dar rienda suelta a la imaginación y crear lo que más le pueda gustar a cada persona, para niños de 0 a 3 pienso que puede ir muy bien que manipulen el material, son muy curiosos en esa edad, sin embargo, para terminar una figura como tal, necesitarían ayuda de un adulto.




@eva.stories.


En una de las horas que compartimos los dos grupos, la profesora nos mostró unas historias de la siguiente cuenta de Instagram @eva.stories., en ella se podía observar los 3 últimos meses de vida, de “Eva” la protagonista en Auschwitz, de esta manera creo que nos quería mostrar una nueva forma de aprender historia y empatizar con la situación de la pequeña, además de innovar en la formar de exponer lo sucedido. Nos muestra el día a día de la niña, a través de pequeños vídeos editados con comentarios o emoticonos, nos muestra como poco a poco a va cambiando su vida, vive momentos muy duros como la separación de sus padres, como llegan los nazis a su ciudad, etc. La idea, de estos pequeños vídeos es plasmar el sufrimiento que vivieron en esa época, como por culpa de unas personas, morían millones de ellas simplemente por tener ideologías diferentes o por no ser de la misma raza.

Eva Stories: La niña que tuvo Instagram durante el Holocausto - El ...

Desde el punto de vista crítico, supongo que habrá recibidos miles de opiniones destructivas, ya que vivimos en un mundo lleno de haters, sin embargo, a mi me ha gustado y sorprendido bastante, pienso que es una manera muy interesante de poder ver lo que se vivió y por otro lado, comentar que me parece muy bien que se haga a través de esta plataforma ya que se puede observar que no sirve únicamente para el postureo, sino que se puede aprender cosas a través de ella.

Elementos reciclables.


En esta segunda práctica, utilizamos elementos reciclables como pueden ser, tapones, briks, canutillos de papel higiénico, etc.
Al llegar al taller, todas las componentes del grupo, enseñamos lo que había recopilado a lo largo de la semana como, envoltorios de café, collar hawaiano, tapones, cajas de diferentes tamaños, etc y nos pusimos a ello. Tuvimos varias ideas por nuestra mente pero después de analizar las ideas, decidimos crear una ciudad ecológica.
"VILLAECO" que así la denominamos, tenía un pensamiento, que no iba a permitir que nadie lo modificase, para la ciudadanía, la economía no tenía ningún tipo de importancia, ellos basaban su día a día en cuidar del medio ambiente, un ejemplo de ello, fue crear un huerto propio de la ciudad.



Desde las aulas se debe enseñar a los más pequeños, que hay que utilizar la regla de las tres R: REDUCIR, RECICLAR Y REUTILIZAR. Con este taller, lo que queríamos demostrar es que últimamente se está dando mas importancia al medio ambiente pero no todo el debido. Poco a poco se puede observar como son los propios niños, los que corrigen a los padres y se conciencian más sobre este tema.

Esta actividad, pienso que sería para niños de edad comprendida entre los 4 y los 6 años, deja que la creatividad fluya y puedan sorprender con sus creaciones.



Manipulación de masas.


En esta tercera práctica, disponíamos de materiales como harina, aceite, sal, etc. Decidimos mezclar todo los elementos de manera que nos quedase finalmente una masa homogénea, aunque todo llevó su tiempo, añadimos la harina y poco a poco  intercalando el agua en pequeños chorros, con el aceite y algo de sal, una vez conseguimos que la masa no se nos pegara a las manos y a cualquier superficie en la que la apoyáramos, empezamos a añadir los colorantes alimenticios, esto fue quizás la parte que más nos costó, debido a que el colorante no era demasiado líquido y hasta que conseguimos que la masa quedara por igual en todas sus partes, tardamos un poco. A mí personalmente la textura y el olor no me parecía demasiado agradable, pero pensándolo ahora y recordando el momento, fue un taller muy divertido junto con mis compañeras. Finalmente, después de tanto pensar en sobre cual sería nuestra obra, creamos una flor muy bonita, constaba de varios colores en sus pétalos, incluía una hoja e incluso el tallo.


Esta actividad es recomendable para niños de 2 a 6, siempre y cuando se pueda vigilar los materiales que se les facilitaría, en mi caso, tengo una conocida que su hijo con un añito y medio, ya hace este tipo de talleres en unas clases de "preparación al colegio", para que el pequeño aprenda las texturas y pase un rato agradable manchándose.




La lengua de las mariposas.

Hoy vengo a hablar sobre una película que hemos podido ver junto con el otro grupo llamada, “La lengua de las mariposas” está película basada en el relato de Manuel Rivas ¿Que me quieres, amor?, se estrenó en 19999, aunque recrea el año 1936 y fue dirigida por José Luis Cuerda.

La lengua de las mariposas (1999) - Filmaffinity

La película trata sobre las relaciones tan especiales que pueden llegar a crear los alumnos con los profesores, en esto caso, une a un menor llamado Moncho Manuel Lozano con su maestro Don Gregorio Fernando Fernán Gómez. A través de D. Gregorio podemos ver la dedicación y paciencia que dedica a Moncho, le aporta sabiduría, además de los conocimientos básicos como literatura, matemáticas, etc. Además, los acontecimientos históricos que transcurren en la película determinan la vida de ellos, tal y como se puede ver en el final de esta.

La lengua de las mariposas | Programación TV
Una de las relaciones que más destaco en la película con la actualidad en la que vivimos, es que el papel del profesor no está valorado como se merece, aún ahora siguen existiendo quejas por parte de los docentes porque no cuentan con un salario acorde a su profesión.

Por otro lado, me ha gustado bastante el hecho de que el profesor trate de enseñar a sus alumnos de manera diferente, no solo en cuestiones académicas, sino en valores, llevándoles al bosque o dejando que ellos mismos creen sus pensamientos y tomen sus decisiones.


En el momento en que la vi, me hizo reflexionar sobre el papel que tienes los maestros en la vida de los alumnos, que importancia pueden llegar a tener en los pensamientos de ellos y como pueden conseguir un cambio en la conducta del alumno, en mi vivencia he podido comprobar como a algunos docentes, se les recuerda más que a otros, afortunadamente en uno de los cursos de Grado Medio, tuve la suerte de contar con María García Sauco, una docente del centro Teide Mayor, que no solo se centraba en los estudios, sino que a cada uno de los alumnos nos enseñaba valores con diferentes actividades, en 2018 ha sido ganadora del Premio Educa como mejor docente de España y eso me enorgullece, saber que ella valora a los demás y los demás la valoran a ella.


María García-Saúco Hijano, ganadora del Premio Educa como Mejor ...


Fotografía: María García Sauco, ganadora del Premio Educa 2018 como mejor docente.


Las obleas y yo.


En esta cuarta práctica, el único material "obligatorio" eran las obleas y cualquier tipo de sirope o chocolate que nos gustase para poder decorar, dando rienda suelta a nuestra imaginación.

He de decir, que una semana antes de este taller, cuando Pilar nos comentó los materiales a utilizar, estábamos deseando que llegara el momento de poder utilizarlos.
No solo llevamos las obleas y sirope de chocolate, sino que disponíamos también fruta, leche condensada, virutas de anís, o corazoncillos de decoración.
Como mantel pusimos unos folios y decidimos que los pinceles para decorar, serían nuestros dedos.
Entre pringue y pringue, íbamos creando unos mandalas comestibles muy bonitos y no solo eso, sino muy ricos.


Esta actividad, pienso que para tratar con niños es muy adecuada, ya que en casa ven a sus padres cocinar y a la gran mayoría de ellos no se les permite tocar nada de la comida, hasta el momento de la mesa, de esta manera sería una forma de fomentar la creatividad a los niños y de que ellos puedan sentirse "independientes" a la hora de crearse un postre para ellos.



Pintando a ciegas.


Para realizar este taller, fueron necesarios materiales que cualquier persona podría tener por casa, como pueden ser pañuelos, ceras, rotuladores y lápices de colores.

Cuando llegamos el grupo al aula, vimos que las mesas en vez de estar agrupadas como en otras ocasiones, estaban seguidas unas de otras formando filas, fue entonces cuando Pilar (docente de la asignatura) con ayuda de todos, cortaba papel continuo para distribuirlo por el largo de la fila y así poder empezar la actividad. Cuando todos los compañeros ya disponíamos de ese papel, empezamos a cumplir las indicaciones de la profesora: 

En un primer momento debíamos dibujar con la mano dominante cualquier dibujo o forma, que nos apeteciese, evidentemente todo el mundo trataba de hacer algo bonito, ya que con esa mano se supone que debe salir algo mejor el dibujo. 

En una segunda indicación, con el pañuelo atábamos nuestra mano dominante a la de nuestro compañero de la derecha para así no tener tentación y poder dibujar con la mano no dominante, en este caso, los dibujos no salían tan perfectos como con la otra mano, debe ser que como no solemos agilizar esa mano, no nos damos cuenta hasta que se realiza algún actividad como esta. 

En la tercera indicación, debíamos taparnos los ojos con el pañuelo, de modo que no pudiésemos ver nada en absoluto y dibujar lo que pudiésemos primero con una mano y después con la otra, a la vez que la docente nos ponía música de fondo para poder relajarnos.


En mi caso, cuando dibujaba con la mano dominante sentía que me queda un dibujo muy bonito (para lo que sé hacer), sin embargo, al dibujar con la otra mano, me sentía bastante incapaz de hacer simplemente un dibujo o una forma, creo que la forma que tuvo Pilar de relajarnos fue ponernos algunos temas de música y pienso que nos vino bastante bien, ya que en el momento de taparnos los ojos, fue para todos un momento de  nerviosismo generalizado.


Pienso que realizar esta actividad en el aula de infantil, vendría muy bien para los niños, concretamente de 3 a 6, creo que con esa edad, ya se puede trabajar la empatía, es decir, entender a las personas que debido a una minusvalía no pueden ver y aún así siguen adelante o también descubrir con que mano se sienten mas cómodos, es decir, descubrir cual sería su mano dominante y cual sería la no dominante, además disfrutarían con los compañeros, ya que se trabaja en grupos.

Finalizando este último taller, fue cuando se barajaba la opción de suspender las clases debido al virus del Covid-19, comenzamos a recibir mensajes por parte de compañeros del primer grupo y por parte de los familiares, sentimos un poco incertidumbre porque no sabíamos a ciencia cierta si era verdad lo que nos estaban diciendo, de modo que nos pusimos nerviosos con la noticia. Más tarde fueron confirmadas las noticias que nos habían llegado por parte del Ministerio de Sanidad, las clases  desde los 0 años hasta las universidades, quedaban suspendidas, hasta nuevo aviso.


Antídotos de la educación artística.

Meditación curativa taoísta de la sonrisa interior.

La meditación de la sonrisa interior es una de las técnicas más simples taoísta, se centra en crear una armonía dentro del cuerpo de manera que te puedes sentir bien contigo mismo, a través de sonreír a cada parte de tu cuerpo, después de ver el enlace adjunto por la docente, decidí buscar algunos tips para llevar a cabo más profundamente esta práctica:
Camboya Religión Buda - Foto gratis en Pixabay

- Sentarse en el borde de una silla con la columna vertebral alineada.
- Sentir la respiración lenta y abdominal.
- Separar los pies y enraizarlos al suelo.
- Estirar el abdomen, como si se tratara de un hilo que tenemos en la cabeza.

Comencé a realizar la práctica, cerré los ojos y recordé un momento en el que me salía la sonrisa sola, cierto es que empecé a sentirme mejor y me mejoró el humor, en el siguiente paso a seguir, me imaginé a mi misma sonriendo y entonces rompí una carcajada, después empecé a recordar cada parte de mi cuerpo y a sonreír por ellos.

Me ha gustado bastante realizar esta práctica, justo al realizarla se puede decir que empezábamos el estado de alarma y con el agobio del teletrabajo y las clases, me ha venido muy bien tomarme un momento para mí. Pienso que precisamente por hacer la práctica en este momento con tantas noticias buenas, malas, peores o mejores, nos ha tocado un poco más la fibra y ha sacado de nosotros nuestra mejor parte, dedicándonos un momento único y feliz.


Como podemos observar en los Budas que se encuentran en los templos, tienen siempre en la cara una sonrisa, son creados para inspirar paz, tranquilidad y sobre todo crear el sentimiento de esperanza en sus fieles.



Mi silueta.


Para empezar, decir que los materiales que he utilizado son folios DIN A4 y lápices de colores, me gustaría poder haberlo hecho como decía la docente en la indicación de la práctica en un papel continuo de manera que otro compañero pudiese dibujar nuestra silueta, habría sido un momento divertido en grupo.
Los colores que he utilizado son el rosa para las cosas que sí me gustan, el negro para las cosas que no, morado las que me gustan que me toquen y de gris las que no.

Por una parte, he coloreado de rosa mi pelo, algunos días me quejo de la poca cantidad que tengo, sobre todo cuando veo gente que se hace unos super peinados, pero luego pensándolo bien, no me veo con otro tipo de pelo que no sea el mío y creo que me favorece mucho. También he coloreado de rosa mis pies, a pesar de los problemas que tengo a la hora de encontrar algunos zapatos, pienso que son bastante bonitos.

Siguiendo con el morado, he coloreado mi espalda, me encanta que me toquen la espalda, acariciándola o haciendo un pequeño masaje, me ha pasado alguna vez incluso de quedarme dormida.
 
El negro lo he utilizado para colorear  una parte de mi brazo izquierdo, sobre los 12 años empezó a salirme un bultito al que no le prestaba la mínima atención, al pasar el tiempo seguía creciendo hasta que entré en el momento de la adolescencia que fui al médico para que me lo quitarán y así fue, pasado un año se reprodujo de nuevo y nuevamente me dirigí al hospital a quitármelo, debido a las dos intervenciones me ha quedado una cicatriz bastante fea.

Por último el gris, lo he empleado para destacar lo que no me gusta que me toquen como puede ser el ombligo, es una parte de mí que desde bien pequeña no dejo a nadie que me toque, ya que siento una especia de grima que me es muy desagradable.
Con esta actividad me he sentido un poco extraña al pensar las cosas que no me gustaban de mí, luego mi cabeza daba un giro y pensaba “¿pero tampoco es tan malo no?”, esos detalles son los que nos hacen únicos. Ha sido una actividad para mí un poco confusa, pienso que a la hora de realizarlo con alumnos ellos tendrían más claro lo que si y lo que no les gusta de ellos mismos, la simpleza de los niños es lo que hace que no den tantas vueltas a las cosas.






















Mini yo.


Esta actividad está enlazada con la anterior, trata de coger una muñeca y crear un mini yo, añadiéndole o quitándole las cosas necesarias para parecerse a nosotros, me encantaría poder hacer está actividad con mis muñecas, pero las tengo guardadas en el trastero después de hacer una limpieza en mi habitación, de todas formas, añadiré la imagen de la muñeca con la que me sentía identificada.


Las muñecas con las que más identificada me sentía en su momento era con las Bratz, eran unas muñecas que se pusieron de moda cuando yo era pequeña, tenían el pelo larguísimo y miles de conjuntos con ropa muy atrevida, en vez de disimular los rasgos que tenían, me gustaban porque lo explotaban más, tenían los labios muy carnosos y aún así iban con algo de labial de algún color, destacaban también sus ojos, eran grandes y aún así con el maquillaje que les ponían se les veían más grandes.


Buscando en imágenes encontré esta Bratz llamada Yasmín, recuerdo que fue uno de los regalos en unas navidades, he decidido coger esta imagen, ya que, lleva una camiseta corta que muestra los brazos y una falda que muestra las piernas, es decir mis inseguridades, además también muestra la super melena que tiene y de la cual yo me siento orgullosa de la mía.

Esta actividad estaría bien realizar en mi opinión con alumnos de edad un poco más avanzada, de manera que puedan dar la vuelta a la situación con las inseguridades que tengan, quizás los más pequeños no tengan la capacidad de saber cambiar ese pensamiento sobre sí mismos. Es una práctica entretenida que te hace recapacitar sobre la opinión que tenemos de nuestros complejos y que finalmente hacer ver que no todo el mundo puede ser perfecto, además lo que no nos gusta nos hace ser únicos y por ese motivo nos tendría que gustar todo de nosotros.


Visita virtual a la exposición "Ante el umbral".


1ª Parte de la actividad


Tras revisar varias páginas en la que se podía acceder a exposiciones virtuales, he decidido quedarme con la exposición virtual de Clemente Bernand titulada “Ante el umbral”, es una presentación compuesta por 30 imágenes de las calles de Madrid, las fotografías son tomadas a raíz de que entraran en vigor las nuevas normativas del estado de alarma.

Clemente Bernad, al realizar estas fotografías quería mostrar como era la vida más allá la puerta de su casa en esos días en los que apenas se podía salir, estas fotografías en otro momento no tendrían ningún tipo de relevancia, sin embargo, en esta situación realizarlas para él era como una aventura, prepararse, salir de casa, recorrer Madrid, fotografiarlo y volver a casa sano.

Gracias a profesionales como él, nos hemos dado cuenta de cómo son las ciudades vacías, en este caso él lo hizo en Madrid, pero me consta que hay muchos más fotógrafos como el, que han decidido captar sus ciudades en soledad. Al ver las fotografías me choca bastante la situación, me entristece saber que hemos llegado a este punto de la pandemia por no ser responsables y que lo único que nos retengan sean las penalizaciones por parte de la policía y no ver como fallecen miles de personas.
Espero que podamos aprender con toda esta situación y que para futuras veces miremos y ayudemos más al vecino y no tanto a nosotros mismos.



En cuanto a la visita con niños, plantearía hacer una asamblea en la que ellos pudiesen participar, haría preguntas como, por ejemplo, ¿sabéis que ha sucedido en todo este tiempo?, ¿por qué motivo no hemos podido salir de casa?, de esta manera contarles un poco lo sucedido y mostrarle sitios que ellos reconozcan para que pudiesen observar la soledad de esos sitios que ellos habitúan a estar con los suyos y que ahora se encuentran vacíos, como parques, zonas de ocio, terrazas, etc.



2ª Parte de la actividad


Dibujamos al natural. Nos fijamos en algún elemento que sea de nuestro interés en casa, puede ser una planta, un objeto, una persona, y delimitamos un fragmento de esa realidad, observamos con detalle y dibujamos sin juzgarnos con los materiales que tenemos. Tratamos de hacer algo que se base en eso que vemos con fidelidad a lo que vemos.















Dibujamos al natural interpretando. Nos fijamos en algún elemento que sea de nuestro interés en casa, puede ser una planta, un objeto, una persona, y luego dejamos que lo que estamos viendo nos traspase interiormente y fluya una imagen interna, es decir, no tratamos de dibujar lo que estamos viendo, sino lo que sentimos y nos provoca. No nos juzgamos y dejamos que fluya libremente. Utilizamos los materiales que tenemos.

















Sueño y algo más.

Durante el confinamiento los primeros días no dormía nada bien, habitualmente por motivos de trabajo, me acostaba muy pronto, sin embargo, estaba tan nerviosa por la situación laboral y por los estudios que no era capaz de conciliar el sueño con normalidad. Hablando con mi familia, les contaba que me parecía una situación surrealista, me recordaba a un videojuego, a una película, en resumidas cuentas, a algo que solo podría pasar en otra realidad paralela, pero jamás en la nuestra. Pasado casi un mes, el encargado de mi departamento me dijo que al no tener hijos me tocaría ir a la oficina, en ese momento en el que descolgué el teléfono y mi jefe me soltó esas palabras, el corazón me dio un vuelco, sentía alegría por poder salir a la calle, sin embargo, un miedo atroz porque mi madre es persona de riesgo y nunca me perdonaría que le pasase algo a ella por mi culpa.

Por la noche, me costó bastante conciliar el sueño, no me quedé dormida hasta pasadas las doce de la noche, me levanté de la cama en cinco ocasiones para comprobar que la alarma estuviese correctamente puesta, se me quedaba la boca seca y me levantaba a beber agua, finalmente me quedé dormida, no se a qué hora sería, pero la sensación que tuve es que nada más quedarme dormida empecé a soñar, soñé que no se podía salir de casa, que para ello tenía que contactar con mi encargado para que me hiciese un justificante y la policía me lo sellara, cuando lo había conseguido, me quedaba dormida y llegaba tarde al trabajo. Puede que no sea un super sueño, yo más bien lo llamaría pesadilla, pero después de tanto confinamiento me aterraba ir a la oficina el primer día y por encima llegar tarde. Recuerdo que al llegar a la oficina se lo conté a mi jefe de departamento y me dijo que si algún día me pasa no ocurriría nada, simplemente podría recuperar el tiempo que hubiese llegado tarde, al final fue un alivio para mí.

La imagen adjunta es un collage de fotografías que me he tomado al retomar la jornada laboral desde la oficina.




Cuentos de hadas.


La actividad se podía hacer de forma individual o en grupo, debido a la situación es muy complicado hacerlo en grupo, por lo tanto, decidí hacerla de manera individual.

El cuento que he seleccionado para realizar esta actividad se titula “La cebra Camila”, trata sobre una pequeña cebra que vive con su madre en una colina. La mama de Camila le decía todos los días que no debería salir sin sus pantalones y tirantes, ya que, donde vivían hacia mucho aire y podría quedar se sin su vestimenta, la pequeña cebra estaba creciendo y según pasaba el tiempo notaba molestia al colocarse esos pequeños tirantes, ella soñaba con rodar por todas las colinas sin esas prendas que le impedían moverse, así que decidió salir sin ellas. Unos de los días que más viento hizo Camila no se puso ni los tirantes ni los pantalones, eran tan fuerte las rachas de viento que se llevo todas las rayas de su vestido, Camila ya no parecía una cebra, era totalmente blanca. Comenzó a llorar y derramo 7 lágrimas, cada una de ellas fueron consoladas por un animal de la colina, ellos a cambio de que Camila no llorara más decidieron ayudarla, la serpiente le regaló un anillo de su camisa, el caracol le trazó una línea alrededor de su contorno, el arcoíris le cedió el azul de sus líneas, la araña le tejió un color para su vestidito, la cigarra una cuerda de su violín, la oca un cordón de su botín. De esta manera Camila llegó a casa más contenta y le dijo a su madre que tenía razón.

Con este cuento se me ocurre más de una actividad a realizar por los alumnos, a continuación, detallaré cada una de mis ideas:

La primera actividad para realizar en el aula se titula “Vestimos a Camila”, necesitaremos:

- 5 alumnos por grupo.
- 1 cebra tamaño grande.
- Materiales para utilizar: lápices de colores, goma eva, cartulinas, plastilina, rotuladores, periódicos,     revistas, etc.


Para esta primera actividad la docente dibujará en papel continuo una cebra para cada grupo, trataremos de utilizar todos los materiales posibles. A los alumnos les contaremos el cuento en asamblea y se pondrán a trabajar, haremos 4 grupos con los mismos componentes, les facilitaremos los materiales y tendrán que realizar anillos de colores para la cabra Camila, podrán añadir botones, purpurina, colorearlos, etc., siempre y cuando les guste a ellos como les está quedando sin exigirles nada, solo dejando volar su imaginación. Cuando hayan terminado de coloreas sus anillos, tendrán que vestir a Camila con los anillos creados. 

















La segunda actividad para realizar en el aula se titula “Mis amigos los animales”

- Grupos de 4 alumnos.
- Fichas de animales.
- Materiales para utilizar: temperas y acuarelas.


En esta segunda actividad, uniremos las mesas y mínimo deberán ser 4 alumnos por grupo, la profesora a cada uno de ellos les repartirá una ficha con los diferentes animales, en el medio de las mesas se colocarán materiales como, temperas, acuarelas, pegamento, brillantina, etc, con estos materiales tendrán que colorear los animales con sus manos, es decir, tendrán que experimentar nuevas sensaciones al tocar las pinturas, no se les pedirá perfección solo que disfruten de la actividad. Cuando hayan finalizado de colorear a los animales, les pediremos que nos digan de que forma les ha gustado más colorearlos y les preguntaremos porque, de manera que así sabremos para próximas veces que actividad realizar con ellos para satisfacer su creatividad.














En mi opinión este tipo de actividades fomenta la creatividad de los niños, como bien hemos hablamos muchas veces en el aula, cada vez a los niños se les dicta más lo que tienen que hacer y no se les deja ser libre, con estas actividades lo que me he propuesto es conocer un poco más a los alumnos, de manera que dependiendo de como coloreen, si lo hacen rápido o lento, si se salen por pasotismo o prefieren ser perfeccionistas, se les puede conocer mejor y entablar una relación más cercana.


Performance.




En todo este tiempo confinados me ha dado tiempo a pensar en muchas cosas, empezando por valorar lo que no valoro en el día a día, algo tan simple como la libertad que tenemos a menudo  de salir de casa, esa sensación de estar encerrado y no poder hacer nada para evitarlo me  frustraba bastante, también el pensar en no poder ver a mis familiares que viven a 5 minutos  me hacía estar incómoda, siempre que nos necesitamos ahí estamos y de esta manera no  podíamos estar como queríamos, aunque nos quedaban las videollamadas de muchas horas por  delante. 

En el comienzo del estado de alarma me levantaba con mucho ánimo, desayunaba, bajaba a mis preciosos perros y luego me ponía con el teletrabajo, como comenté en mi presentación soy una persona muy positiva, así que me gusta empezar bien el día, en los ratos libres me ponía con cosas de la universidad o pasaba ratos con mi madre y tratábamos de hacer algunos ejercicios para movernos un poco y distraernos de manera que nos pasara más rápido el tiempo. 

Vivo en el centro de Madrid, concretamente a cinco minutos de la estación de Sol, muchos días al venir de la estación hacia mi casa, pensaba “Ojala no hubiese nadie en todo el centro y se pudiese caminar sin que nadie me entorpezca el camino”, sin embargo, ahora en el estado de alarma, no había cosa que más me entristecía que bajar a los perros y no ver ni una persona en sitios en los que habitualmente hay cientos y cientos de personas como en el Museo del Prado.

Un día decidí ir a comprar por salir un poco más allá de mi portal y recuerdo que sentía unos nervios que pocas veces he tenido, a la hora de pagar en caja no sabía cómo actuar cuando una señora se saltó la distancia social, no quería que se lo tomara a mal pero necesitaba pedir la distancia mínima recomendada, un cajero del supermercado se percató de mi cara cuando la señora no respetaba la distancias, le tuvo que recordar las normas de seguridad, eso me alivió pero aun así llegué a mi casa con tantos nervios pasados, que la tarea de ir a comprar decidí dejársela a mi hermano.

Mas tarde recomendaron el uso de mascarillas, al salir a pasear me chocó bastante ver a todo el mundo cubrirse con ellas, al verlo en la televisión me sorprendió, pero observarlo en persona me dejó bastante chafada, me pareció una situación muy triste que con el tiempo he normalizado. Ahora mismo el uso de estas es obligatorio, siempre y cuando estés en sitios donde no se pueda respetar la distancia mínima recomendada. Personalmente, casi no me la quito, al prepararme para trabajar me la pongo, en el autobús me la pongo, al pasear me la pongo, es decir, ya es una parte de mí, se podría decir que paso más tiempo con la mascarilla que con el móvil y mira que en este tiempo es difícil.  

Mi decisión de elegir esta fotografía como representación de mi primera performance, es porque con la mascarilla se puede decir que “nos tienen encarcelados”, para mí representa un agobio constante, no me permite respirar bien pero quizás lo que peor lleve es no poder emitir o percibir expresiones a través de gestos como puede ser una sonrisa, he decidido que se vea que ata mis manos, ya que, no se puede salir sin ellas, una vez puestas no se pueden tocar, para salir de casa hay familias que deben elegir entre comer o tener mascarillas debido a los elevados precios que tienen.

Me ha sorprendido bastante para bien realizar esta práctica, aunque en principio no sabía muy bien que tema plantear. El hecho de realizarla, en principio he de decir que me daba un poco de vergüenza, suelo siempre expresar mis sentimientos más felices, pero no mis miedos, sin embargo, al relatar como me sentía los primeros días en mi salida, me ha dado una sensación de alivio que en este tiempo de confinamiento no había sentido, creo que esta actividad debería hacerla todo el mundo, pararse un segundo y reflexionar por lo menos sobre lo vivido y aprender de ello. 



Reflexión final.


Para terminar la asignatura de Fundamentos de la educación artística, plástica y visual en la educación infantil he realizado la siguiente reflexión.

Cuando al revisar el horario vi que tenía esta asignatura me sorprendió bastante, sin embargo, no sabía ni me hacía una idea de como se iba a llevar a cabo. Estamos acostumbrados a relacionar la palabra arte con músicos, escultores, bailarines, etc., pero con los talleres que hemos realizado en el aula me ha cambiado la perspectiva de ver el arte.

Por un lado, en la parte teórica que realizábamos conjunta con el primer grupo era un poco caos hasta que todos poníamos de nuestra parte, ya que éramos casi noventa personas en un aula diminuta, una vez todos calmados la docente con mucha paciencia podía llevar a cabo la clase mostrándonos nuevas formas de crear arte, una de esas clases que me gustaría destacar fue una de las primeras en la que nos mostró a través de pequeños vídeos en Instagram la vida de Eva, una pequeña que sufrió el holocausto.

Sobre las dos lecturas recomendadas, el libro de la didáctica en educación infantil y el libro de Reggio Emilia he aprendido que a través de la observación los niños aprenden nuevas técnicas artísticas, así como las etapas del dibujo por las que pasa un niño en su desarrollo, lo principal qué destacaría de esos libros sería que a los niños hay que dejarles que experimenten en todos los ámbitos de la vida, pero principalmente en la infancia, dejar que se equivoquen sin etiquetarlos porque algo no lo hagan bien, tienen que aprender nuevos conocimientos  y sentirse cómodos y seguros para que en un futuro no tengan problemas de ningún tipo.

Por otro lado, en la parte práctica he de decir que es donde he podido recrearme, de todas las actividades que hemos realizado en clase he podido sacar muchos recursos que podré utilizar el día de mañana con mis alumnos/as o simplemente llevarlas al aula durante mis prácticas. He aprendido que del material reciclado se pueden construir figuras que dan mucho juego, como a través del arte podemos enseñar a los niños temas transversales como, las matemáticas, desarrollar su creatividad e incluso aprender palabras nuevas en otros idiomas. Me gustaría destacar la tarde pintando con chocolate, fue una de las prácticas más divertidas, no se me olvidarán las risas con mis compañeras y el dolor de estómago que teníamos después del atracón de obleas.

Por último, me gustaría dar las gracias a Pilar docente de la asignatura por poner todo de su parte para que nos gustase el temario a tratar, en la situación en la que nos hemos encontrado en el último cuatrimestre a través de Teams nos daba las indicaciones para realizar el blog, sin ningún problema a pesar de todas nuestras preguntas. Me apena haber terminado así esta asignatura ya que pienso en todas las actividades que podíamos haber realizado y que, sin embargo, no se han podido hacer. A continuación, dejo una frase que para mí resumiría la sensación que me llevo de esta asignatura.


“Y cuando menos te lo esperas viene una asignatura y te sorprende”




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